Reconfiguraciones
Artistas: Ana Velasco, Antonio Seguí, Bibiana Vélez, Carlos Collazo, Carlos Maturana-Bororo, Carlos Zerpa, Daniel Senise, Delia Cugat, Francisco Rodón, Hernando Tejada, Hugo Cifuentes, Jim Amaral, Jorge Julián Aristizábal, José Horacio Martínez, Juan Guillermo Restrepo, María Clara Piñeyro, María de la Paz Jaramillo, Marta Minujin, Miguel Ángel Rojas, Noé Nojechowiz, Rafael Ortiz, Rodolfo Abularach, Roser Bru, Sammy Benmayor, Tabo Toral, Victor Laignelet
Curaduría: Miguel González
La representación ha sido objeto de cambios, revisiones, acotaciones, citas e hibridaciones. Los distintos procesos que determinaron esas actitudes tuvieron su génesis en las reflexiones y prácticas que emanaron de los ismos de la modernidad. Desde la segunda mitad del siglo XX la crisis de los valores hegemónicos, el protagonismo de la periferia, la lucha por los derechos civiles, las guerras y desplazamientos, las consideraciones en torno a lo multiétnico y la expansión de las definiciones de género, crean un escenario propio para reanimar la figuración como un vehículo con prerrogativas para formular ámbitos diversos de iconografías.
La presente exhibición explora distintos perímetros donde los lenguajes viscerales de la figuración son abordados en un amplio espectro, no sólo dirigiéndose hacia la evocación de los entornos físicos, naturalistas y concretos, sino acudiendo a otros espacios donde alegoría y símbolo privilegian el centro de argumentación. Estas consideraciones múltiples convierten el ejercicio de materializar en un territorio abierto donde las posibilidades de expresarse parecen ser infinitas. Al explorar la colección de este museo he conseguido agrupar artistas de seis décadas que han innovado en el ámbito de la representación y sus conceptos expandidos modificando notablemente las visiones del constituir y trazar a fin de ir resignificando con diversos argumentos el concepto de figuración. Esos hechos lo podemos constatar a través de obras de artistas que pertenecen a diez nacionalidades distintas.
Este humanismo diverso, amplio y hasta desvertebrado ha sido posible a las agudas transformaciones que no sólo han acusado los campos políticos y económicos, sino que se han perpetuado en el entorno mismo de lo visual que se ha enriquecido con la presencia de la fotografía, el cine, la televisión, el video, la pantalla del computador y los efectos de los medios virtuales.
La pintura y el objeto ya no han sido los mismos. No diría que se han desintegrado pero sí han buscado diferentes rumbos, enriqueciéndose en una existencia veloz, desafiando lo urgente y comprometiéndose con una sociedad que se debate entre el cinismo y lo cosmético.
Reconfiguraciones está estructura a partir de distintos discursos que al ser confrontados exponen sus contradicciones, articulan líneas de comportamiento con intenciones comunes y también con divergencias, agencian formalismos con recursos técnicos y cromáticos divergentes. La complejidad y diversidad de sus resultados es directamente proporcional a los ámbitos donde han sido producidas.
La pintura y escultura han constituido una vocación arraigada en el arte producido por latinoamericanos. Ha sido una tradición ininterrumpida, aunque sus ejercicios más ponderados han estado siempre desafiando constantemente cualquier acto inhibitorio. En ese empeño los medios se usaron como un fin en sí mismo y luego las distintas reflexiones han contribuido a realizar actos trasgresores. Esta exhibición puede ejemplificar las diferentes posturas al respecto.
El espectro argumental discute sobre la reformulación de la ciudad, el retrato real e imaginario, las interrelaciones culturales, el campo expandido del recuerdo, la región de los sueños y el deseo. Ejercicios visuales que sugieren, señalan y argumenta en torno a diferentes comportamientos del individuo y su entorno tanto externo como interno.
Miguel González
Curador