En Cauce
Artistas: Claudia Patricia Sarria, Felipe Arturo, Óscar Ardila
Curaduría: Alberto Campuzano y Lorena Díez
A lo largo del desarrollo urbano de la ciudad de Cali, el territorio ha sido objeto de cambios de sentido, la nostalgia aparece contrapuesta al desarrollo en las tensiones entre la arquitectura que se construye y el lugar que esta ocupa. Desde la práctica artística, toda intervención en el espacio pretende ahondar y provocar distinciones o señalamientos sobre el lugar.
Fue así como la posibilidad de pensar una intervención en los jardines del Museo La Tertulia se vio influenciada por las alteraciones del territorio que tuvieron lugar durante el siglo XX y que dieron lugar al espacio tan particular que configura el museo, específicamente aquellas que afectaron la ruta del agua, el “antiguo curso” del río Cali, borrando del mapa el famoso «Charco del burro». Aquel que hoy día está presente en la memoria colectiva de la ciudad, como mito o desde la vivencia.
Este ejercicio propone pensar el contexto, las relaciones que emergen de las dinámicas propias del espacio del Museo, retomando una preocupación actual a escala mundial: el agua, su cuidado, origen, acceso y uso. Con especial atención a la utilización de los jardines que acopian las tensiones expresadas en la nostalgia y en el terreno mismo. Fue entonces a modo de dialogo como se negociaron los términos de inserción y la relación de los artistas con el entorno que surge, aparece y se hace visible a través de la historia y la memoria que descubrimos en la experiencia del lugar. Los tres artistas, Claudia Patricia Sarria, Felipe Arturo y Oscar Ardila intervienen los jardines, desde la preocupación acerca de la ruta del agua que subsiste y su futuro incierto en una ciudad que muta continuamente.
Un río atravesado por un sueño
De la serie: La re-ubicación de las cosas
Claudia Patricia Sarria
Valla publicitaria 6 m x 3 m
Técnica mixta (acuarela e impresión digital en gran formato)
2017
La obra es una valla publicitaria que copia el modelo de promoción para anunciar la creciente oferta de proyectos urbanísticos e inmobiliarios en la ciudad, buscando así señalar la lógica generalizada del desarrollo en el espacio urbano. El proyecto que se anuncia consiste en un nuevo desplazamiento del río Cali, respondiendo a la necesidad de conectar físicamente el Museo La Tertulia con la Casa Obeso Mejía.
Esta propuesta hace parte de un proyecto de largo alcance denominado La teoría del fin ‘El apocalipsis’, que concentra la conjetura de que los seres humanos buscarán la manera de estar cada vez más solos y aislados, a pesar de necesitar de otros para sentirse seguros en un territorio. La teoría se divide en tres líneas consecutivas: “El deseo del orden”, que busca que todo tenga un lugar espefico, “La re-ubicación de las cosas y re-definición”, y “El consumo del otro ‘El Canibalismo’”.
«Un río atravesado por un sueño», remite a la famosa frase con la que el poeta Carranza describía a la ciudad de Cali como «un sueño atravesado por un río», y se enmarca dentro de la segunda línea de trabajo de la artista: «La re-ubicación de las cosas». En este caso, al abordar problemáticas ambientales, Sarria señala el nuevo orden que se establece, a partir de todo tipo de intervenciones y transformaciones urbanas cuya solución no busca ser la más simple o aquella que responda mejor a las necesidades del entorno. Por el contrario, están concebidas para crear el espejismo de un progreso basado en el bienestar, el cual pretende activar el consumo en un “mundo feliz” y enajenado.
Vemos así como este proyecto se entroca también en en el tercer eje de su proyecto “El canibalismo”, que puede ser otra forma de ver el hecho de la recanalización del río, donde “el agua estorba en este caso…”.
Desvío
Felipe Arturo
Instalación con piola de algodón, varas de guadua, amarres a árboles, postes y edificios, letras en lámina de metal perforado.
2017
Desvío es una reconstrucción aproximada del antiguo lecho del río Cali en líneas topográficas hechas con cuerda, que colgadas desde diversos soportes producen una serie de catenarias que dan la idea de un lecho visto desde abajo. La intervención se completa con un texto inspirado en la historia de este fragmento mutilado del «Charco del burro», que fue geometrizado a mediados del siglo XX para dar continuidad a la vía al Mar, hoy Avenida primera o carrera primera oeste. Esta cirugía fluvial y geológica es un claro ejemplo del legado modernista en las ciudades latinoamericanas, en donde la idea de una sociedad productiva, eficiente y progresista impulsó modificaciones radicales de su territorio.
Estas mutilaciones territoriales son recordadas con frecuencia por fenómenos cotidianos como la humedad y la lluvia. Fenómenos que retornan al Museo para recordar el antiguo camino del agua, dejándonos en un limbo moral y estético en el que deambulamos con impotencia frente a la historia y con ambivalencia frente al presente.
Este proyecto se suma a otras intervenciónes relacionadas con los cuerpos de agua como “Ríos sombrío” una de las intervenciones: Calle 22 Bogotá (2015), Bar Huerequeque en el Espacio Odeón (2017), y la muestra del Premio Luis Caballero 2017, al cual ha sido nomindo con la pieza el “Río persigue la gravedad” que es una exposición que condensa un acervo de proyectos desarrollados a lo largo de 8 años de viaje y recorridos por el Amazonas.
Lavapiés
Óscar Ardila
Intervención fuente – materiales diversos
14.5 m x 1.3 m
2017
Lavapiés es una propuesta que consiste en la construcción de una corriente sobre una de las antiguas orillas del río. Para esto se construirá un canal sobre los terrenos del jardín por el que correrá agua hasta desembocar en la fuente.
Para identificar las orillas del río y la antigua topografía del terreno que permanecen hasta hoy se revisaron planos y fotografías históricas. En este caso la fuente se ubica justo en el trayecto de una de las orillas. Además, actualmente recibe agua de la cañada, algo que ha sido de gran significado para el desarrollo de esta propuesta y de esta exposición.
Esta corriente de agua puede ser utilizada por los visitantes para refrescarse los pies y avanzar hacia la fuente. Con esto se trae de nuevo a la memoria colectiva el antiguo significado de este lugar como balneario público para los habitantes de Cali. Igualmente se plantean preguntas en torno a la falta de escenarios públicos en los que interactúen los habitantes de la ciudad con los cuerpos de agua de forma activa y recreativa. Asimismo, se resalta la importancia del agua como recurso imprescindible para la sostenibilidad de una ciudad.